Una vez asentados y con la primera tapa en la barriga decidimos comenzar la ruta, para ello nos
hicimos con un panfleto en el que estaban descritas todas las tapas de los
bares participantes y un plano de la zona para saber dónde encontrarlos, y nos
hicimos nuestra pequeña ruta. La oferta consistía en una tapa, que participa en
un concurso, por 1€ y un botellín de Estrella damm con esa tapa por otro euro.
Presentación de tapas |
Nuestro periplo comenzó en la Antigua Taquería, con un taco
cuyo ingrediente principal es la patata, para nuestro gusto un poco insípido y
de lejos lo peor que probamos esa tarde. Seguimos acercándonos a la zona con
más bares de la zona y lo siguiente que probamos fue una tosta de lacón sobre puré
de patatas mezclado con queso, y con estas dos tapas la ruta nos estaba
desilusionando un poco, pues esta tapa tampoco nos marcó especialmente. Cuando
nos dirigíamos hacia el siguiente punto una tapa llamo nuestra atención y
decidimos hacer una parada, el Fantástico nos ofrecía una suerte de picho
moruno de pollo marinado en crema de cacahuete que estaba francamente apetitoso.
La siguiente parada que teníamos planificada fue en la Casa de las Tostas, siguiendo
por la calle Argumosa, y aquí ya iba gustándonos un poco más el plan, en este caso fue
ventresca con pisto manchego. En el Portomarin nos seguimos con otro de los
pinchos más clásicos en este caso una costilla con salsa barbacoa y arándanos,
que puede estar en el top3 de nuestra ruta. Y terminamos con dos de las mejores
tapas que creemos que se pueden degustar en “Tapapiés”, el burrito secreto en O
Pazo de Lugo, una fusión mexicano-ibérica muy conseguida y el sueño olímpico de
SU&SI.
Finalmente acabamos tomando un café fuera del circuito de las tapas, en La Fugitiva, una cafeteria libreria con un ambiente muy bohemio, con gran variedad de tés y una buena selección de tartas.
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